Irremediablemente el otoño llama a la puerta aunque el calendario diga que es verano todavía. Este año los higos han madurado más temprano,es por el calor;ha hecho un verano caluroso y poco lluvioso. Mi higuera es vieja pero aún da frutos y es extraño:tiene casi más higos que hojas.Está al lado de un viejo pozo que también acusa el paso del tiempo y, aunque  ahora no puede dar agua, sirve como escalera para llegar a las ramas altas de la higuera y arrebatarle los higos que, como no puede ser de otra manera, compartimos con los cuervos y con cualquier otra ave que se cuele a degustar los higos maduros y dulces. Me gusta comer los higos al natural , según los arranco del árbol pero hoy, también forman parte de una tarta sencilla y otoñal que vamos degustando con helado de vainilla por encima para recordar esa frontera en la que estamos entre el verano y el otoño. Ingredientes 300 g de higos 2 huevos grandes 130 g de harina Una cucharadita rasa de levadura de repostería 120 ml de acei...
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