La zamburiña es un molusco de la familia de la vieira,bastante más pequeña pero con un sabor a mar más concentrado.
La dificultad que nos encontramos es su escasa existencia en los mercados de fuera de Galicia.En casa es la primera vez que las comemos frescas y tal delicatessen se la debo a mi madre que me las compró y las pagó (dicho sea de paso).
Después de las investigaciones precisas para encontrar la forma óptima de preparación, concluí lo siguiente:la mayor torpeza sería enmascarar su sabor con salsas superfluas .
Sólo quedaba entrar en faena.
Lavé las zamburiñas y sin más al horno a temperatura media.
Al poquito tiempo se empiezan a abrir y saqué la bandeja para quitarle una valva.
Rocíe con un aceite de perejil y escamas de sal Maldom o ,en su defecto,sal gruesa marina.
Lo importante es vigilar para que no se pasen y se resequen, mejor que pequen de crudas.
*Aceite de perejil: triturar aceite de oliva virgen extra con perejil fresco.
Son un bocado exquisito
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